pero afecta en demasía al que sabe (o no sabe)
es sabido que se es mortal (y hasta el momento las entidades
inmortales no parecen tener auto conciencia de su inmortalidad)
pero la ignorancia es dicha y de qué le sirve a la bestia
vivir con el peso de la nada original sobre su lomo
solo sé que aunque sepa
siempre puedo hacerme el weón
y olvidarme de que sé
por unos momentos
para flotar sobre la incertidumbre
de lo que hay más allá del flotar
Edgar Fernhout (1912 - 1974) |
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